Presentación de El Lazarillo de Tormes (S. XVI)

La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades (PINCHA AQUÍ para acceder al PDF de una edición anotada) inaugura un género, la novela picaresca, que va a provocar una aparición fulgurante en la creación literaria española (tendrá muchas imitaciones y recreaciones) y larga presencia del personaje del "pícaro".

La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades, también conocida como Lazarillo de Tormes, es una obra de autoría anónima publicada en el año 1554. Asimismo, se trata de la primera manifestación de la novela picaresca.

Con un estilo epistolar, de manera autobiográfica y en primera persona, esta obra describe la mísera vida de un joven llamado Lázaro, el cual pasa por diferentes dificultades desde que es niño hasta llegar a su edad adulta. Al mismo tiempo el libro es un retrato y una crítica de la sociedad española del siglo XVI.

Este texto asume el modelo autobiográfico de un modo novedoso: el discurso se presenta con la apariencia de un documento real,  una  carta en la que Lázaro de Tormes cuenta su vida (especialmente su infancia) marcada por el hambre y la miseria. El relato intenta justificar la deshonrosa situación de Lázaro, acomodado en el oficio de pregonero real[1], a cambio de consentir que su mujer sea la concubina[2] del Arcipreste de San Salvador.

El protagonista narra con humor sus peripecias y desvela algunas deshonrosas confesiones en el marco de un eficaz realismo en la descripción de la sociedad o en la crítica del estamento eclesiástico. El Lazarillo de Tormes, así,  conseguía que por primera vez en Europa una narración en prosa fuera leída a la vez como ficción y de acuerdo  con una sostenida exigencia de verosimilitud y de realismo. (...) Para quienes vinieron después, conjugar ficción y verosimilitud en una narración en prosa fue el arranque de la mayor revolución literaria desde la Grecia clásica: la novela”[3].

Nace así el personaje del pícaro, que tendrá una larga carrera en la literatura española posterior, en lo que se denominará como novela picaresca. El pícaro, Lazarillo de Tomes, es un plebeyo (de la clase más humilde), sin recursos económicos, que intenta salir adelante mediante el servicio a distintos amos y a través de su astucia para sacar provecho en las situaciones más difíciles.


El niño Lázaro trabaja bajo las órdenes de sucesivos amos (un ciego cruel, un cura tacaño y egoísta, un hidalgo empobrecido, un fraile, un buldero, etc.) con los que sufre todo tipo de calamidades. Su experiencia, llena de escenas tan tristes como cómicas, le proporciona un aprendizaje que demuestra tanto en su habilidad para encontrar soluciones a sus problemas, como en la capacidad para la narración ingeniosa y la sutil argumentación.

Primera edición

La obra destaca por su humor e ironía, por la construcción de un personaje que manifiesta un paulatino aprendizaje, por la mezcla de la retórica clásica y la expresividad popular y por la doble perspectiva del niño y del narrador adulto que confluyen en un discurso en el que no hay hueco para la conclusión moralizante, abierta al juicio del lector.

Salamanca



[1]  Pregonero real: Empleado al servicio del rey que hace público en voz alta, en calles y plazas, los anuncios, avisos, leyes o ventas que son de interés general para la ciudadanía.

[2]  Concubina: Mujer que habita con un hombre como si fuera su marido. En la sociedad española del S. XV era un término despectivo (actualmente también conserva esa connotación negativa, nunca se usaría para referirse a una mujer en ese contexto) que aludía a los casos en que una mujer habitaba o tenía relaciones con un clérigo. Es el caso de la que será mujer de Lázaro, concubina del Arcipreste (alto cargo eclesiástico que busca con la boda de Lázaro un modo de ocultar su relación ilícita).

[3]  Rico, F. (1990): Breve biblioteca de autores españoles. Seix Barral. Barcelona.

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